Esta imagen en relieve de marmolina con textura de bronce presenta a la Virgen María sosteniendo al Niño Jesús, una representación conmovedora que simboliza el amor maternal y la conexión divina. La marmolina con textura de bronce le confiere un aspecto único y elegante, resaltando los detalles de esta escena religiosa. Ideal para la devoción personal, la contemplación espiritual y la decoración de espacios sagrados, esta imagen en relieve es una expresión conmovedora de la fe cristiana.